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Jaime Hayón
El límite entre el arte y el diseño.
Si hay un diseñador a nivel nacional que haya conseguido encontrar y triunfar con su lenguaje propio ese es Jaime Hayón. Su colorido y optimista mundo pictórico le ha valido para comunicar sus diseños, situarlos cómo piezas de valor a nivel mundial y adentrarse en el mundo del arte.
Tras graduarse en Diseño Industrial consiguió una beca para el mítico centro creativo “Fabrica”, sólo un año después le propusieron montar el departamento de diseño. Su estancia a los mandos de esta sección de la escuela duró siete años, los cuales Jamie Hayón no dejó en ningún momento de diseñar por su cuenta. Así creo una colección de piezas cerámicas y toys que no pasaron desapercibidos para muchas marcas cómo la editora catalana Artquitect, la cual se enamoro del trabajo de Hayón y lo que en principio sólo fue un simple encargo, acabo convirtiéndose en toda una colección. Casi al unísono, otra firma catalana, Metalarte le encargó la lámpara Josephine y a partir de ahí marcas cómo BD Barcelona, Established & Sons, Moooi, Lladró… empezaron a contar con los diseños del madrileño en sus catálogos.
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Bocetos que suponen el punto de partida de las creaciones de Hayón · VER PRODUCTOS
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Su colección de diseños llenos de ironía para la firma cerámica Lladró, lo posicionó ante el gran publico. Revalorizar una marca, con solera y clasicona convirtiéndola en moderna le dio poder y licencia para conquistar tanto a los consumidores como a las marcas nacionales e internacionales.
Con una de estas últimas se catapultó hacia lo más alto del diseño contemporáneo. La firma danesa Fritz Hansen, tras seis años editando y respaldado algunos de sus diseños, se enamoró por completo del mundo onírico de Hayón y le permitió diseñar la habitación 506 del icónico SAS Royal Hotel en Copenhague, que en 1958 Arne Jacobsen diseñaría la 606, hito del cual nacería la aclamada butaca Swan.
La habitación funde diseños de ambos. La clásica Drop chair de Jacobsen, encaja en la mesa Analog diseñada por Hayón. La estancia se complementa con dos piezas claves en la carrera de Fritz Hansen y Jaime Hayón: El sofá Favn y el sillón Ro. Un espacio luminoso y acogedor, que las formas orgánicas del diseñador hacen que ya a simple vista parezca cómodo.
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Habitación 506 del SAS Royal Hotel (Copenhague), diseñada por Jaime Hayón
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Quizás esa facilidad para crear a cualquier escala, le ha valido para tener una fructífera carrera no sólo como diseñador de producto si no cómo diseñador de interiores o de efímeros.
Espacios públicos como el parque para niños a las puertas del High Museum of Art en Atlanta se contraponen a diseños a pequeña escala cómo cerámicas o pasteles helados para marcas cómo Häagen-Dazs. El espectro de diseños que abarca el mundo Hayón, es inacabable y todos ellos parecen estar tocados por una magia que los convierte en éxito.
Tal y cómo comenta el propio Jaimie Hayón en alguna de sus entrevistas a modo casi de decálogo: “Creo en la manualidad. Creo mucho en el detalle, en las cosas muy bien hechas. Creo en los materiales nobles y naturales. Creo que el diseño comunica. Y creo en el humor”
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Dibujos y primeros diseños de proyectos de Jaime Hayón · VER PRODUCTOS
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En los últimos meses, también tienen su sello espacios cómo la cafetería del mercado central de Valencia o el recién inaugurado Hotel Barceló Torre de Madrid, en el cual parece haber plasmado todo su universo decó más vital.
Este ultimo es el primer hotel diseñado íntegramente por él. Todo un recopilatorio de las piezas más representativas de su universo particular conviven con algunas piezas de diseñadores cómo el matrimonio danés GamFratesi, dentro de un ambiente muy colorista y un tanto cañí.
En el hall, la aclamada colección Gardenias para BD Barcelona le da la bienvenida al huésped, invitándolo a estar cómodo. Las salas repletas de sillones en alegres tapizados, Ro y Fri de la reputada marca Fritz Hansen se relacionan con las mesas Palette que alternan mármol, madera y metal, del diseñador para &Tradition.
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Habitación del Hotel Torre Barceló (Madrid)
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Las habitaciones, que invitan a no salir del hotel, las adornan sofás Favn y mesitas Monkey Side Table plasmando la ironía tan característica del sello Jaime Hayón.
Su originalidad inclasificable puede gustar o no, pero en innegable que su obra explora lo diferente sin dejarse llevar por estilos ni corrientes establecidas si no, siguiendo sus propias inclinaciones artísticas.
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